Por fin ha comenzado el primer viaje oficial de los Sussex convertidos en una familia de 3 miembros y han aterrizado hace solo unas horas en Ciudad del Cabo. Meghan Markle ha bajado del avión con el pequeño Archie en brazos -del adorable gorrito blanco con un pompón ya hablaremos otro día) con un look ultracómodo y una declaración de moda instantánea. Bueno, dos:

1. Que los pitillos blancos NO han muerto, ni mucho menos. Solo han estado descansando.

2. Que quedan IDEALES con bailarinas blancas, destalonadas y con un tacón mini.

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Estas bailarinas no son un calzado cualquiera. Pertenecen a la firma Everlane, americana y relativamente asequible (cuestan 145 euros) y están elaboradas en 100% ante. Acabadas ligeramente en punta, tienen un tacón de poco más de un centímetro que las convierte en híper cómodas porque ¿sabes que el calzado totalmente plano no resulta cómodo para todo el mundo? Con esta mínima elevación caminar -y más con un bebé en brazos- es cien veces más fácil.

Así, Meghan ha recuperado unos sencillos vaqueros pitillo blancos que ha combinado con una camisa amplia del mismo color y un abrigo gris clarito. Todo simplicidad y practicidad tras un largo vuelo que ha durado toda la noche. Además, lleva el cabello recogido en un moñito bajo de bailarina súper favorecedor.

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Harry y Meghan han venido acompañados de la niñera de Archie dado que les esperan unos días repletos de compromisos en Ciudad del Cabo. Allí permanecerán madre e hijo mientras que el Príncipe pasa unos días por su cuenta visitando otros países como Malawi, para finalmente reunirse con ellos en Johannesburgo.

Amigas, empieza lo que promete ser un intenso despliegue de lookazos de Meghan... y esperemos que con posado de Archie incluido, que ya tiene 4 mesecitos.

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