María Teresa Campos ha acudido a una nueva sesión de rehabilitación en una clínica de Madrid de la que ha salido muy sonriente. La presentadora, feliz por su regreso a la televisión, se ha parado con los periodistas apostados a la entrada y salida del centro de fisioterapia, al contrario que otros días. La veterana periodista ha fichado por el nuevo proyecto de Telemadrid, ‘Aquellos maravillosos años’, que lidera Toñi Moreno. Sin embargo, el futuro profesional de su hija Terelu aún no está muy claro. Todos los rumores apuntan a que la ex colaboradora de ‘Sálvame’ estaría en negociaciones para unirse al equipo de ‘Espejo Público’, presentado por Susanna Griso, y que se emite en Antena 3, principal competencia de Telecinco, cadena donde lleva trabajando desde hace casi 10 años.

Pero su madre prefiere mantenerse al margen y asegura que en esta vida «no creas nada hasta que no lo veas». Estas palabras se pueden interpretar como una forma de mantener la cautela hasta que su hija no firme ningún contrato.

Tanto a la salida como a la entrada de la clínica, ha acudido acompañada por un amigo que le ha servido de muleta para poder andar mejor. Antes de subirse al coche, María Teresa ha hablado de su nieta Alejandra Rubio, que ha vuelto a la universidad. Su regreso a las aulas hace muy feliz a su abuela, que se muestra orgullosa.

Alejandra ha confesado que tiene muy buena memoria, igual que su abuela. Una cualidad que María Teresa confirma: «El utensilio más importante en mi vida profesional ha sido la memoria», una larga trayectoria profesional que espera no haya llegado a su fin.

De reciente duelo

Recientemente, las Campos han recibido un duro golpe, la pérdida por el cáncer de un amigo de la familia, Alexandre Lacaze, músico malagueño e íntimo amigo de la pequeña Terelu.

La ex colaboradora de ‘Sálvame’ compartió en sus redes sociales su dolor por esta pérdida, y escribió: «Era un luchador lleno de talento».

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