El pasado sábado 7 de septiembre, Carla Pereyra y Diego Simeone sellaban su amor con un mágico ‘sí, quiero’ en la Toscana. Un paraje de ensueño y un amor de película no podían dejar otro resultado que un día inolvidable. «Decidimos celebrar nuestro Amor y rodearnos de los mas nuestros, en un entorno idílico en el corazón de la Toscana, no hay palabras que describan todo lo que pudimos vivir y sentir, en el corazón de cada uno de los que nos acompañó quedarán momentos que serán inolvidables! Gracias a nuestras familias, a los mas amigos, a todos los que nos hicieron tan pero tan felices!», escribía la modelo en sus redes sociales poco después del gran día.

Ahora, una semana después, ha compartido la que sin duda es la imagen más bonita, mágica, tierna y especial del día de su boda. Dos protagonistas imprescindibles de ese día, además de los novios, fueron sus hijas, Valentina y Francesca, y con esta última, precisamente, ha protagonizado una fotografía que ha conmovido la red.

Francesca acompañó a su madre a las pruebas de su vestido, una creación que Maria Grazia Chiuri diseñó para Dior en París. Y hasta la ciudad del amor se desplazó varias veces la novia de la mano de su pequeña, que miraba a su mamá como si de una princesa auténtica se tratase.»Dulces sueños», dice la argentina junto a la preciosa instantánea.

El vestido de Dior que la modelo argentina eligió era de muselina de seda y tenía el escote de hombros caídos que se ajustaba a su cuerpo realzando su figura. La falda era vaporosa y la tela llevaba bordados de hilos de seda y cristales de Swarovski. Carla apostó por el tradicional velo que era de tul y que luego se quitó para la celebración.

Fuente: Leer Artículo Completo