Los reyes han viajado hasta Sevilla para acudir a dos eventos: el primero en el Real Alcázar, donde han presidido la III Reunión del Pleno de la Comisión Nacional y seguidamente han asistido a la inauguración de la exposición ‘El viaje más largo’, ambos para rendir homenaje a la expedición a la primera vuelta al mundo de la que se cumplen 600 años. Para tal ocasión, la reina Letizia ha llevado un estilismo de lo más favorecedor y con el que hace de nuevo un guiño a Jualiana Awada, luciendo el mismo vestido que lució en su visita a Argentina y con el que coincidió con la primera dama.

El sencillo vestido en color crudo lo firma Pedro del Hierro y pertenece a la colección Primavera/Verano 2019. El corte midi con falda de vuelo y el escote redondo cerrado y sin tirantes hace que resalte la silueta de la reina. Lo combina con stilettos de tacón fino en ante marrón de Carolina Herrera–que también tiene en distintos colores. Hasta ahí era un look correcto pero sencillo.

La gracia de este se encontraba realmente en los complementos: un bolso de asa corta en blanco y camel, concretamente el modelo Camelot, también de Carolina Herrera, que pertenece a la colección Otoño/Invierno de 2015, anillo de Karen Hallam y pendientes de diamantes y perlas. Además la esposa de Felipe VI ha optado por el cabello suelto y liso y el maquillaje en tonos granates.

Cuando lució el mismo vestido en Argentina lo combinó de manera diferente: con cartera de piel y salones en tono camel, ambos de Magrit, y los colgantes de perlas que llevó durante la visita oficial de los Macri a España de 2017. Pertenecen a las denominadas “joyas de pasar” que la reina Victoria Eugenia de Battenberg legó al joyero real, y la infanta Elena los llevó el día de su boda con Jaime de Marichalar.

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